
La magia es una parte fundamental de la vida diaria: salir siempre con el pie derecho para que todo vaya como se quiere, persignarse antes de empezar a vender la fruta bajo el sol abrasador.
No hay nada como el olor a incienso para poder atraer a esos clientes que forman parte de esa exquisita ola de historias. La magia nunca debe faltar en la vida porque de ella dependemos para sorprendernos. Es fascinante cómo ponerse los mismos calcetines dos días seguidos sirve para encontrar dinero en la calle, para mí es de vital importancia ponerme primero mi suéter para que todo mi día vaya viento en popa.
Quién diría que los animales formarían parte de este fenómeno tan impresionante. Los animales suelen ser tan agradecidos que te brindan un poco de felicidad, proveen abundancia emocional y también monetaria con tan solo acariciar esos lomos peludos.
La vida sin la magia se va perdiendo y no encuentra sentido alguno, todo depende de cómo cada persona vaya administrando su propia magia y pueda brindar un poco a los demás con un simple ten un excelente día.