Colores

Blanco. 

Aquí todo es blanco. Es un espacio vacío. Siento un zumbido que pronto se convierte en presión. Lo escucho y lo siento en mi cabeza. Quiero tirarme al piso y hacerme bolita pero no siento mi cuerpo, sólo mi pesada cabeza. 

Negro.

No veo nada. Siento mis palpitaciones y mi respiración a mil por hora. Todo se siente más rápido de lo que puedo resistir. Siento más peso del que puedo aguantar. Tengo miedo y no puedo ver nada de lo que pasa. Vuelvo a sentir mi cuerpo y, de golpe, todo lo que siento es dolor. Desesperadamente quiero reventar, dejar de sentirlo. Quiero volver al vacío.

Rojo.

Nado en un río con agua densa, salada y roja. Rápidamente la corriente del río comienza a elevarse hasta convertirse en una monstruosa catarata por la que caigo en picada y el rojo inunda mi vista. La gran catarata desemboca en una bahía rocosa con olas salvajes que me arrastran de un lado al otro, golpeándome una y otra vez. No siento mi cuerpo, sólo siento dolor.

Blanco.

El zumbido, el dolor, todo sigue aquí. No veo nada, ni siquiera a mí misma, sólo veo el vacío blanco e inerte. 

Olvidé mi nombre, la fecha, tu nombre, el lugar que habitaba. No sabía distinguir el día de la noche, ni los sonidos que se escuchaban en este vacío, todos al mismo tiempo, sin poder enfocarme en uno solo. Mi cuerpo no se sentía mío, el dolor, una vez más, se esparcía por todo mi cuerpo. Había una angustia en mi mente que no parecía tener razón de ser.

De repente apareció un destello de un recuerdo en mi mente. Una enorme sombra venía hacia mí de frente. Doy la vuelta y lo último que veo es el destello. No puedo soportar el recuerdo, me debilita y vuelvo al vacío. 

Este vacío parece más seguro, ya no siento mi cuerpo pero tampoco dolor ni angustia. No sé si ha pasado el tiempo. No sé si sólo debo abrir los ojos y así el vacío se llenará. Tal vez esa sea la solución pero ni siquiera sé dónde están mis ojos.

Por fin, sonidos. Parecen sollozos. Parece una conversación que aún no puedo distinguir. 

Por fin, una sensación. Se siente un poco húmeda e incierta. Ahora la sensación es un poco más cálida. Me siento más segura. Pero sigo en blanco.