¿A dónde te has ido querido? ¿A dónde te ha llevado tu destino? ¿Por cuál de todas las puertas escogiste entrar? ¿Será que fue la pequeña por donde se escuchaba el viento escapando de su interior? ¿O la de madera donde se podía observar un destino sin fin?
¿Acaso te has ido? O aún sigues aquí entre espejos rotos y gritos que se repiten a la misma hora.
Eres sólo un fantasma que no he podido dejar escapar. Tú ya moriste en un futuro, te casaste en un presente y me olvidaste en un pasado.