Lo que escribí para alguien que no existía

pexels-brenoanp-442535-1136575-scaled-thegem-blog-default

La epifanía de tu ser era algo que no esperaba. En este mundo insensato, estar a tu lado era un regalo. Días y noches te anhelaba, mi ser te deseaba y mi cuerpo te necesitaba.

Tu bonhomía despertó en mí algo que jamás imaginé sentir. El acendrado de tu ser me hizo querer creer otra vez. Pero, lo que un día fue un amor inefable, hoy no es más que un recuerdo repudiable; una simple falsedad que ahora me persigue por la eternidad.

Ciegamente creí en ti, sin dudar jamás que tu sentir hacia mí era real.  No me queda más que el olvido de un recuerdo superfluo, pues, lo que pensé que sería sempiterno, fue en realidad efímero: las caminatas bajo el rocío de las lluvias y el petricor que emanaba, el arrebol, la aurora que junto a ti observaba. La limerencia que por ti sentía cuando estaba a tu lado, solo se trató de la nostalgia por lo que un día fue, pero que hoy se ha acabado.

Fuiste mi alba de cada mañana, mi serendipia de esta vida. Tu elocuencia me enamoró y tu luminiscencia me cegó. Lástima que nada de eso te importó.

Lo que un día para ti escribí, era para alguien que no existía. Porque cada verso en el que te nombraba era una mentira que tú formabas. Lo que querías que de ti pensara, no está. Mi sentir por ti no es inmarcesible, y pronto podrá irse.

La nostalgia y melancolía que dejaste con cada una de tus mentiras, van perdiendo vida. Tus recuerdos se van borrando y la resiliencia está llegando junto con el olvido de un oscuro capítulo que en mí impregnaste con palabras que te describen, pero en las que no existes. Entonces, solo queda una página en blanco con una nueva historia por comenzar, porque mi alma ya no te anhela más.

Esto no ha acabado, lo que escribí para alguien que no existía fue solo la introducción de un nuevo capítulo en mi vida.

0

Dejar un comentario

X