Mis almohadas apestan a sal. No hago otra cosa más que invocarte con mi primer suspiro matutino y mi último pensamiento de la noche. Pero hace mucho que tu perfume…
Xury
Ahora, ya que han pasado los años, me parece que he comenzado a amarte más. No viajábamos en auto, ni en taxi, solíamos caminar durante largo rato solo para llegar…