a las madres no les gusta el ritmo
del Impala rojo
ni las fotos en el periódico que hablan español en vísceras
y dicen hijos de unos padres de otros
proveedores de telas y retazos
para unos más
porque los cadáveres
siempre son los hijos de otros
el marasmo de sesos en la carretera
y los miembros del cuerpo angelado pero que vuelan
aparte
se rebanan al aire las piernas de los hijos de otros
los hermanos practican la alta velocidad
como si el aire
tuviera otras opciones de manejo
si vamos a la retacería a buscar el brocado
hecho del mismo cuero textil
en que fueron concebidos los asientos del Impala
podremos estar seguros
de que serán otros
los que rotulen los pliegos de la nota roja
los hijos no deseados de otros