Cambios en la época contemporánea

winter-566380_1920-thegem-blog-default

Ante la inminente era de los cambios, de la pluralidad de opiniones y la diversidad de perspectivas, me encuentro con la oportunidad de realizar algún cambio al menos en mí, en las letras que escribo, ya sea en mi computadora o en mi libreta.

Mi historia no inicia “cierto día”, porque lo que busco es evitar los clichés. De hecho, comienza una noche de diciembre, específicamente en la del solsticio de invierno, una noche un tanto fría, pero soportable.

Mientras analizo mi situación, me percato de lo cómodo que me siento en estos momentos.      Por curioso que parezca, sólo hubo una meta que no logré cumplir este año, todos los demás propósitos se cumplieron sin que me percatara de ello.

Pensativo, sereno y un tanto satisfecho, me propongo emprender el viaje interior que he pospuesto, mientras preparaba mi espíritu y mi mente. Ahora, sé que me enfrente a lo que sea, seré capaz de salir incólume. Pienso que, quizás, esa es la finalidad de las vacaciones, el otorgarle al individuo la paz interior para retomar su vida justo donde la dejó antes de iniciarlas. Una especie de balance que regule el yo interior con el yo externo, que encuentre       congruencia entre lo que nos identifica personalmente y lo que mostramos al mundo.

No estoy seguro de realizar algún cambio en mi vida, pero estoy abierto a la mejora constante. No me gusta el término “deconstrucción”, pero podría decir que es satisfactorio encontrarse en un supuesto de ese estilo.

Si mis letras llegan a los ojos o al espíritu de quien las necesite, será pura suerte, la cual no creo que exista, pero considerar la posibilidad de ello me conduce a un cambio, la posible creencia en fuerzas mágicas que podrían conspirar o no en nuestro favor.

17

Dejar un comentario

X