Hace nueve días se habrían cumplido siete meses de su corta vida. Puedo imaginar demasiadas cosas. Tal vez, al vivir fuera de casa, encontrarnos en un pequeño cuarto con lo…
Recuerdo cuando te conocí por primera vez. Estabas tan flaquito y cubierto de esa capa de pelo en todo tu cuerpecito. Un pequeño bebé con una cara de que iba…
Aquella noche que entre lágrimas me encontré llorándote, me pregunté temerosa si eras real o solo una creación efímera de mis anhelos, de mi soledad, de mi tristeza. Quizás no…
De niña nunca vi las estrellas. Tal vez se deba a que vivía en el corazón de una enorme y capitalista ciudad llena de smog, autos viejos, fábricas y sueños….
I. El atardecer naranja sale de la curva de tus pies medio chuecos desde nacimiento. Tu personalidad se encapsula en la tela aterciopelada de la blusa que usas el día…
Hoy me nació escribirte de nuevo. Creo que he llegado a relacionarte mucho con una canción, así que, a partir de hoy, ya no serás el chico de mis sueños,…
Desde que te fuiste, la vida perdió todo su sentido, sus colores y su pasión. Nada ha sido igual, pues lo que solías representar ya no se encuentra en ningún…
Bizcaíno, porque miras a los lados y nunca fijas tu mirada en mí, que estoy frente a ti. Ojo tuerto, te insulto, insulto tus ojos; estrábico, cegato, petirrojo, torcido, bizcoreto,…
De amar hambrienta y pobre. Aunque ya sea costumbre, arden estas manos; tendones agotados de escribir ilusiones. Redactando imagino la cumbre. Idea sin rostro, deseo marchito. Aún no tienen…
El almanaque deja volar sus hojas entre constelaciones y olas. No se sabe la exactitud del tiempo y la espera. Uno navega con la vida entre el cielo y las…
Recuerdo que me confesó en privado, rogándome que no le contara a nadie, que tenía un diario en el que escribía de todas las personas a las que su vergüenza…
Ayer lo volví a ver. Era de noche y cenábamos en nuestro restaurante favorito; aquel en el que la pareja de ancianos siempre tenía una taza de café para ofrecer….
Para él. Ya no recuerdo su nombre Uno Tentación de matar aquello de lo que huimos. Obligación de huir de mi nombre y la culpa. Ofuscación de la voz…
Su presencia, en alguna parte de mi mente, se hizo notar a los nueve o tal vez diez años. Las prioridades dentro de una primaria religiosa llegaban a ser contradictorias…
Te estoy llorando con un ojo de desesperación y el otro de impotencia. Te estoy llorando, hermana, es todo. Enriqueta Ochoa Yo tenía un amigo, pero el viento otoñal se…