Lo que escribí para alguien que no existía
A menudo pienso en el gran momento en que te encontré. Sentí una especie de nervio convidado con una inmensa felicidad. Tal vez lo demostré con mi rostro sonrojado. Cuando vi tu rostro cubierto de lunares supe que, aunque hubiera
¿La vida?
En este enorme lienzo llamado vida trazo mis propios destinos, como alguien liberando sus pensamientos en las páginas de su libreta. No creo en deidades escribiendo nuestro guión, sino en la poesía que con cada elección tejemos. Las
El último adiós
Todas las noches sentía sus fuertes brazos alrededor de mi cuerpo. Ya no había frío, ni tristeza. Solo una calidez demasiado familiar. Cada noche, antes de dormir, me leía un cuento que ahora solo despierta su recuerdo en mí. En
Cuando me di cuenta
Cambiaste. Así, de repente, de un pensamiento a otro. Sin piedad. Y yo aún no había terminado de describirte.
Lo que escribí para alguien que no existía
Tengo un hombre guapo y maravilloso a mi lado, pero no lo puedo ver. Solo veo los quehaceres de la casa, las obligaciones diarias. Me desanima tanto. Al mirar a mi niña interior, puedo ver que me convertí en todo
Hueles
Hueles a otoños en París. A vino y tango en Argentina. Hueles a libros en un café, y a lienzos en el escaparate. Hueles a poesía, libertad y alegría. Mentira. No hueles, no puedes oler. O, por lo menos,
Lo que escribí para alguien que no existía
Te siento tan cerca… Tanto que no te siento. Te tengo, pero te desvaneces pronto, no es tan simple entenderlo. Pero cómo lo haría si guardas todos mis secretos y todo lo que siento. Estás en un vacío
Luz en la oscuridad
A veces pienso en alguien que ya no existe en mi vida. Lo llamaría error, pero no se le puede llamar error a quien alguna vez hizo de mis días tristes los más felices. Esos días cuando el alcohol e
Divagaciones de una adulta chiquita
Cuantas veces me he preguntado: «¿Quién soy? ¿Qué hago aquí?». Las respuestas cambian, pero siempre tienen algo en común. Desde pequeños nos enseñan que lo mejor es ser feliz. ¿Qué pasa cuando me siento triste? Te dicen que seas fuerte,
Aliciente
Ella solía levantarse, aparentar ser feliz, abrir la ventana y embriagar sus pulmones con el olor de la quebrada Palestina. Les daba comida a las palomas y así podía seguir sus días. Se inyectaba la morfina. Admiraba sus pestañas, jugaba
Para mi gran amor que aún no conozco
Sé que tiene que haber ciertas características en nuestra relación. Sé que me apoyarías en todo y tendré la confianza suficiente para contarte lo más vergonzoso que me pasa. Porque sin importar el plan, siempre la pasaré bien contigo y
Quizás
En un mundo paralelo, una pequeña planta enraíza cuando León duerme en su cama, tal como le enseñó Mathilda. Entre las calles de este mundo está abierto un club de jazz. Sus dueños: un matrimonio llamados Mía y Sebastián.
Mi compañía favorita
Gracias por esa compañía que siempre me brindaste, por llevarme a conocer ciudades y países nuevos que nunca creí conocer. Por ese tiempo que nunca me negaste para ayudarme con mis tareas de matemáticas y de inglés que no entendía.
¿Existió?
Amor es lo que sentí aquella vez. O por lo menos, lo que creía sentir. Ahora lo veo como una obsesión. Un espacio creado por mí, para mí. Me olvidas, pero yo me aferro a tu recuerdo. ¿Es bueno hacer
Ese futuro incierto
Fue en el club de literatura. Me pidieron escribir una carta sobre cómo me imaginaba en el futuro. No me llegaba nada. ¿Qué quiero ser? ¿Seré doctor o abogado? No. ¿Dentista? ¿Cirujano? No tengo idea. No lo había pensado antes.
En tu cielo favorito
Te busco en las estrellas de tu cielo favorito. Te busco sabiendo que volveré a verte. No sé cuándo. No sé dónde. Te recuerdo valiente, justa, sonriendo y con sueños. Esto no es el fin. Te encontraré para
Bitácora
Vivir de odios exacerbados. Ser impulsado frenéticamente por un falso oasis de utopía y júbilo. Ya no hay salvación. No hay forma de ser escuchado en esta esférica cacofonía que se cierne como una fina tela sobre el pensamiento. ¿Cómo
Un minuto
Tus labios estaban tan cerca de mi boca, que con un solo movimiento esto terminaría. Con mi más grande fantasía destrozaría tu vida, y también vendría mi destrucción. Así que me alejé, hui de ti y me conformé con
Canciones
I. La que no volvió Me quedé con sus miradas, me las guardé para mí, cuando salí de mi pueblo porque me tuve que ir. Juré ir por ella en mayo, le dije espérame aquí, le di
Poema que escribí para alguien que no existía
La soledad es bella, si la compartes con almas que te llenan el vacío. Eso fue lo que aprendí de ti. Un miedo, un duelo. En el verano se esfumó y se marchitó en el invierno. No sé cómo
Poemínimos que escribí para alguien que no existía
Ojos que no ven, corazón que no siente Pero sentí, sentí la ansiedad en mis manos, el sudor, el temblor repentino, la aceleración palpitando en mi pecho. Sentí dolor, sentí miedo. Y, aun así, decidí ver, antes de que fuera
Señorita Quién
Con cada parpadeo miro unos ojos de diferente color y al pasar la lengua por mis labios, siento unos labios de distinto sabor, respiro profundo para calmarme, pero siempre es diferente el aroma, por el dolor, tengo una mano en
Única
Eres única como aquella mujer que decidió desafiar a la humanidad, aun sabiendo que su rebeldía la llevaría a la hoguera. Eres única como las brujas de la edad media. Única como las miradas encontradas en una primavera agotada expectante